Pisando el acelerador en Australia: El camino hacia el éxito de Vanessa Giordani

Pisando el acelerador en Australia: El camino hacia el éxito de Vanessa Giordani

La carrera de Vanessa Giordani en la industria automotriz empezó con un encuentro afortunado: le llegó a las manos un folleto que anunciaba carreras de ingeniería durante su época como universitaria en Brasil. Poco podía imaginar que ese momento la llevaría a desarrollar una carrera profesional en Nissan, al otro extremo del mundo, encargándose de garantizar la más alta calidad de piezas, vehículos y procesos para Nissan Australia.

Al principio, mientras estudiaba ingeniería en la universidad, a Vanessa le apasionaba más la parte práctica de la carrera. Vanessa comenta: "Una vez que completé los cursos obligatorios de matemáticas y me adentré en la resolución de problemas, descubrí mi pasión por ello". Ese momento revelador la llevó a debutar en la industria automotriz como ingeniera de calidad.

Vanessa participa en el evento Onigiri Action en Nissan Australia

La oportunidad llamó a su puerta cuando se le presentó la posibilidad de cumplir la ambición de su vida: trabajar en el extranjero. Vanessa se mudó con entusiasmo a Australia, sin esperar siquiera a completar su solicitud de visado antes de dar el gran salto. Esto la llevó a hacer una escala inesperada en Nueva Zelanda antes de que pudiera empezar oficialmente su nueva vida en Australia. Finalmente, aprovechó la oportunidad de unirse a Nissan, donde encontró su lugar en la planta de fundición de Melbourne.

En el agitado e imparable ambiente de la planta de fundición, Vanessa forjó sin miedo su camino a seguir, primero como Gerente de Calidad y luego como Gerente de Nuevos Negocios. Al pensar en este primer puesto, Vanessa nos comenta lo que supuso para ella el reto de "desarrollar un equipo fuerte e implementar nuevos sistemas y herramientas que nos ayudasen a mejorar el rendimiento de calidad". Su talento la llevó a ser ascendida a Gerente de Nuevos Negocios, donde se le confiaron numerosas y exigentes responsabilidades, incluyendo la negociación de la asignación de nuevos componentes para vehículos eléctricos que se fabricarían en Australia. Una vez más, Vanessa aceptó el reto y no tardó en asumir un nuevo cargo lejos de la planta donde había causado su primera impresión.

Después de siete años en la planta de fundición, la dedicación y las habilidades de Vanessa la llevaron a ocupar el puesto de Gerente General Adjunta de Compras de Nissan en Australia, un cargo que le encanta. "Esta posición me permite evaluar la eficiencia en nuestros diversos flujos de trabajo, y me proporciona la oportunidad de preguntar: '¿Qué estamos haciendo?', '¿Cómo podemos cambiar?', '¿Podemos hacerlo mejor?'", explica Vanessa con entusiasmo. A medida que Nissan se prepara para la electrificación a nivel global, Vanessa está ansiosa por determinar cómo los flujos de trabajo existentes pueden adaptarse a la revolución de los vehículos eléctricos.

Otra causa cercana al corazón de Vanessa es la representación de la mujer en la industria automotriz. Ya ha participado en múltiples actos de la iniciativa "Girls on Track" (Chicas en la pista), un programa australiano concebido para apoyar a las jóvenes de 15 a 22 años que deseen emprender una carrera profesional en esta industria. Vanessa está satisfecha con los progresos alcanzados por la iniciativa e incluso comenta que una participante consiguió un puesto en la planta de fundición de Nissan gracias a la red.No obstante, reconoce que "tenemos que hacer más; de lo contrario, otras chicas no tendrán las mismas oportunidades".

En opinión de Vanessa, su comunidad de contrataciones cuenta con "una buena mezcla de culturas". Ahora bien, es consciente de la importancia de dar más visibilidad a las mujeres en todos los aspectos de la industria automotriz, no solo en unos cuantos. Ella cree que aún persisten suposiciones anticuadas, como la idea de que las mujeres necesitan a un hombre para comprar un coche, lo cual frena la participación de las mujeres en el sector. Son estas percepciones las que, según ella, hay que cambiar si se desea seguir avanzando.

Vanessa con su familia

Al fin y al cabo, el salto de Vanessa a la industria automotriz fue, en cierto modo, fruto del azar. Reconoce que su éxito y su pasión proceden de las oportunidades que se le presentaron y de la inspiración que obtuvo de sus mentores profesionales. Esta orientación, que recibió cuando estaba empezando, alimenta ahora su determinación de inspirar a quienes están bajo su liderazgo, animándoles a impulsar el avance del sector. Especialmente en el caso de las mujeres a las que asesora, Vanessa tiene el objetivo de convencerlas de que el sector autmotriz es un lugar al que realmente pertenecen.

En el vibrante mundo de la ingeniería automotriz, Vanessa Giordani ejemplifica el poder de aprovechar las oportunidades, desafiar el statu quo e inspirar a la próxima generación de líderes del sector. Su trayectoria demuestra que la dedicación y la pasión por el cambio pueden llevarte lejos… ¡incluso si no lo habías planeado en un principio!